Mantener limpio el automóvil es importante para que esté bonito y también para alargar su vida útil. En Wash App Car podrás encontrar un servicio de limpieza a la altura de lo que necesita tu coche y, hoy, en este artículo, vas a poder leer algunos consejos para lavar el coche como ellos.
Te presentamos algunos de los mejores consejos de cara a cómo lavar el coche a mano para que tú mismo puedas hacerlo sin problema.
¿Qué necesito para lavar el coche como un profesional?
Lo primero y fundamental es llevar a cabo la preparación necesaria. Lleva tu coche a un lugar apropiado en donde puedas maniobrar con facilidad y tampoco molestes a nadie. Además, lleva contigo los suministros y herramientas necesarias.
Necesitarás agua, jabón para coches, cepillos suaves y trapos de microfibra. Es muy importante que los trapos sean de microfibra para evitar arañazos cuando vayas a secar el coche. También necesitarás limpiacristales, cepillo lavar coche y aspiradora de mano entre otras opciones.
A la hora de elegir los productos, procura escoger siempre los de mejor calidad, ya que estos tendrán una gran importancia en el acabado de tu coche. Recuerda que estás buscando un acabado profesional, por lo que deberás de rodearte de la mejor materia prima.
¿Cómo empiezo?
Empezarás por el interior. Para facilitar el proceso de limpieza trata de vaciar al máximo todo lo que puedas el interior del vehículo. Esta es una oportunidad perfecta para tirar aquellas cosas que siempre dices que vas a tirar, pero nunca lo haces.
Con el interior vacío por completo quita las alfombrillas y empieza aspirando bien el suelo. Cuando tengas el suelo bien limpio, el siguiente paso serán los asientos. Aquí puedes utilizar productos especiales, por ejemplo, limpiadores específicos para el lavado tapicería coche.
También hay otros productos especiales como los limpiadores del salpicadero. Sigue las instrucciones del fabricante y repasa bien todos los lados del coche. Uno de los aspectos que más se suelen olvidar son los conductos del aire. Si los limpias bien, luego te quedará un olor bastante agradable en el coche.
Aprovecha también para limpiar los cristales desde dentro con el limpiador de cristales y el paño de microfibra para no rayarlos.
En cuanto a las alfombrillas, sacúdelas bien afuera y, si quieres, para facilitar la tarea de limpieza las puedes limpiar con agua. Si dispones de un compresor de aire también lo puedes utilizar. Si decides limpiarlas con agua las dejarás secando mientras llevas a cabo la siguiente parte, la limpieza del exterior.
¿Y las ruedas?
Las llantas suelen contener una gran cantidad de suciedad y, para eliminarla, lo mejor es contar con productos específicos para estas. Te recomendamos que limpies las ruedas antes de empezar con la carrocería.
En este caso, el consejo a seguir es elegir un producto que no sea muy ácido. La acidez en los productos puede acabar provocando que las llantas pierdan brillo o color. Utiliza un cepillo para acabar con los residuos y la suciedad de estas y, después, aplica un abrillantador de neumáticos para que estos se vean como el primer día.
Con estos consejos tu coche contará con unas ruedas que parecerán recién puestas. Además, el producto utilizado evitará parte de la suciedad de los próximos días.
Siguiendo con el exterior
Llevarás a cabo la limpieza exterior utilizando una esponja. Te recomendamos utilizar un jabón especial para autos, nada de utilizar otros productos como detergentes lavavajillas o jabón de platos si no quieres estropear la carrocería.
El primer paso es enjuagar el coche bien con agua para eliminar la suciedad que está suelta. Una vez que el coche esté bien mojado será el momento de utilizar el jabón con la esponja para empezar el enjabonado.
Para hacer la tarea más fácil y que no se te olvide nada puedes dividir el coche por secciones. Empieza por las puertas y, si quieres, desde arriba hacia abajo. Esto es una cuestión personal, por lo que puedes hacerlo como quieras.
Con el coche bien enjabonado llegará el momento de enjuagar para acabar con todos los restos de jabón. Utiliza bien de agua para acabar con todos esos restos y luego utiliza la bayeta de microfibra para secar el coche. Recuerda la importancia que tiene esta bayeta para no arañar la carrocería.
Para finalizar…
Ahora que tienes el coche limpio puedes valorar el estado de la pintura. Si esta no brilla lo suficiente puedes pensar en pulirlo. Si cuentas con una pulidora y te sientes habilidoso puedes hacerlo tú mismo, si no, lo puedes llevar a un taller para evitarte complicaciones.
Lo que sí que puedes hacer es utilizar cera de carrocería. Con esta cera conseguirás un acabado bastante más brillante y también estarás protegiendo la pintura. Además de la cera, presta atención a aquellos detalles que se te hayan podido pasar por alto, por ejemplo, los paneles de las puertas o el techo del coche. Con esto ya tendrás tu coche a punto.